En las siguientes imágenes, tomadas el veinte de abril al mediodía, se pueden ver los pasos para la construcción de una guardería biosostenible.
Se le da forma a la masa de celulosa para formar una celda. La avispa se ayuda de las patas delanteras y de las mandíbulas para ello.
Se abanica, con lo que se tenga más a mano, para enfriar lo amoldado y que solidifique.
Se va inspeccionando ocularmente el interior de las celdas terminadas para comprobar que todo se ajusta a los planos originales. Eso nos da ocasión de ver la celda que se está construyendo justo encima de todas las demás.
Y aquí, durante otra redundante inspección, tenemos la oportunidad de apreciar el magnífico aparato volador de tan esforzada señora que, a pesar de ser una reina, no se le caen los anillos cuando tiene que hacer trabajos de albañilería.